Configuración

General


Notificaciones

Volumen Notificaciones     


Sonidos


Notificación
  


Gol
  


Portada


Visualizar Galería
Visualizar Videos

César Andrade Habló en el Torneo Sub 15.

Por: luisdanielgonzalez
12/07/2013 | 20:02:54

Hace unos años oír el nombre de César Andrade era asociarel fútbol con un episodio triste, una tragedia que conmovió a todos haciendoolvidarnos de las bellezas que este talentoso canterano del Atlas había regaladoen su corta carrera.

Pero el tiempo ha pasado, y el extremo rojinegro quealguna vez destrozó con sus gambetas y con sus disparos a la defensiva del CruzAzul en una Liguilla hoy está más de pie que nunca y aún ligado a la de gajoscon la que hizo magia.

Magia que hoy compartió con los chicos del Torneo Sub 15Verano 2013 de la LIGA MX.

Más de 500 jugadores viven la experiencia de estacompetencia que los acerca a esa ilusión de ser profesionales, con nutriólogos,concentración, transportes, canchas de primer nivel y que mejor sicólogo que unhombre que saboreó con su talento las mieles de la redonda y que hubiera deseadoque alguien como él le diera una plática como la que hoy compartió.

“El mejor clásico de mi vida no fue contra las Chivas enel Jalisco, sino el 1A contra el 1B en mi primaria pateando un frutsi”.

Andrade rompió el hielo desde el inicio, no eran esaspalabras doctrinarias de alguien serio, era la charla cómplice de un hombre queen su rostro aún tiene la sonrisa de un niño que corrió tras un balón.




“Mi meta era estar con ellos: Rafa Márquez, Daniel Osorno,Juan Pablo Rodríguez, cuando los vi ni siquiera me hablaban pero yo hasta veíabonito cómo se reclamaban una jugada.”

El Fútbol le dio todo a Andrade, amigos, sueñoscumplidos, un rincón para cambiarse en el vestuario de la Academia, incluso conocerel mar.

“La primera vez que iba a viajar con el primer equipo mepuse muy emocionado que hasta quería saltar, hablé a mi familia en mi pueblopara contarles; el juego era contra Puebla y yo nunca había volado, fue unahora de padres nuestros, aves marías y todos los rezos para que el avión no secayera.”

Sin cumplir siquiera los 20 años, con esa mirada inocentede jugador de llano trasladado al césped, Andrade debutó con los Zorros delAtlas mostrando gran nivel:

“Mi sueño se cumplió para el segundo tiempo contra laFranja, LaVolpe se paró y dijo las palabras mágicas: Chocolatín, sí tú, ven, canchas de tierra y mi familia pasaron pormi mente, le dije al Profe que sí a todo, pero no le había entendido nada, élme motivo con las siguientes palabras: miraboludo, vamos perdiendo uno a cero, te voy a meter a jugar, si pierdo elpartido te bajo del equipo y jamas te doy una oportunidad, eso me quitó elnervio.”

Cuando logro ese primer sueño tenía mucha experienciadetrás, misma que pidió a los Sub 15 valoraran para no perder el piso:

“Preguntaron si era novato, pero yo había pasado porremolinos, canchas de tierra, pague mi arbitraje cerca de 500 partidos, todaslas dificultades del llano, no era un novato, solo estaba en el escenario másbonito que había visto con la cancha forrada de césped.”




Recuerdos llenos de alegría salieron de la boca y lamemoria del ex futbolista, ilusiones que todos los presentes seguir estabandeseando emular.

“En mi primer gol la gente gritaba sin conocerme, los dePumas me veían con odio, yo corría como loco mientras mis compañeros me jalabanel pelo y me pateaban hasta que les dije: oigan si el gol fue a favor,simplemente fue genial.”

Pero la plática debía tomar otro sendero, el que llevó aCésar a terminar de forma abrupta su sueño, aunque le hizo encontrar otros:

“Todo era genial, llegué a la Selección, jugué una Final,pero dejé de jugar porque me equivoqué por una mala decisión que tomé. Un díacontra Monarcas me pusieron a calentar y no me metieron hasta que faltaban tresminutos, sentí que me ofendieron, tontamente me enojé, le dije a unos amigos quenos tomáramos unas chelas, han pasado 14 años y no he olvidado esa noche,cuando desperté no era mi casa, no era mi cuarto y estaba mareado, no sabía cómohabía llegado al hospital.”

La voz de Andrade no se quiebra, es pausada, las sonrisasya no están, pero la mirada de los jugadores del torneo no dejan de mirarlemientras habla:

“Fue un 10 de noviembre de 1999, alcohol, un volante, unauto, la imprudencia. Fue hasta el siguiente día que mi hermano me dijo: vasdespertando de 15 días en coma y además te amputaron la pierna.

Yo no me había preparado para esto, había sacrificadotantas cosas, pero esto simplemente me sucedió. Busqué mucho tiempo alculpable, y solo hasta siete años después lo encontré dentro de mí.”

La enseñanza iba quedando en los rostros de los chicos,una novel estrella que había comenzado hablando de sus primeras cáscaras ahoracontaba de su pierna perdida. Andrade sabe muy bien lo que perdió:

“Siempre admiré Antonio Carlos Santos, a Ramón Ramírez,los dos eran zurdos como yo, jugué contra los dos y cuando Santos me felicitó pormi forma de jugar yo no me la creía.”




El ex rojinegro no ocultó el viacrucis que pasó ni lacatarsis que lo hizo recapacitar:

“En mi depresión pensé que controlaba el alcohol e hizoestragos en mi vida. Me sentía un mártir, me sentía amolado, quise morirme hastaque un día me convencieron de dar una plática motivacional y un chico mepreguntó al final: verdad que ese día teaccidentaste por andar tomado, se me salieron las lágrimas oír a ese chicodecir la verdad, me equivoqué y no podía culpar a nadie más.”

El tiempo dio a Andrade la serenidad para hoy saberhablar ante un público atento, mismo al que su historia ha calado aunque tengan15 años:

“En la vida, como en el futbol, entre más practiques,entre más lo hagas y trabajes lograrás ejecutar eso que buscas o que quieres.Luego de muchas pláticas hoy mi herida está sanada, ahora esta es mi vida, midecisión.Luchen por sus sueños, pero vean qué quieren hacer de su vida, seanlos mejores, pero tomen bien las decisiones. Hoy después de 14 años estoy a puntode publicar un libro y soy conferencista, quién lo hubiera creído. La vida tepone muchas opciones, los sueños por delante y para ello hay que tomar lasmejores decisiones. Estudien, lean, amplíen sus proyectos de vida y busquen sussueños tomando las mejores decisiones.

Al final César Andrade ha sabido bajar de pechito toda suexperiencia como cuando jugaba en las canchas:

“Accidentarme terminó siendo muy productivo en mi vida,lo he asumido y hoy puedo saber qué ha valido la pena en mi vida y lesrecomiendo que se preparen, lean, estudien, amplíen sus horizontes; tienenmuchas cosas por vivir, luchen por lo quieran y si tropiezan no se detengan.”

Andrade comenzó gambeteando con sus recuerdos a losjóvenes del Sub 15; sin embargo, al final anotó en la experiencia de todos una lecciónde vida, tal vez su mejor gol.

Dirección de Comunicación de la LIGA MX/ASCENSO MX

Relacionados

BBVA
Voit
Konami
Charly